miércoles, 7 de marzo de 2018

OJO AL DATO

Indefensión de los socios

Triste pero real, que a pesar de los años en los que vivimos y con los adelantos tecnológicos que se supone que tenemos, ocurran cosas como la que me pasó durante el transcurso del partido de Champions entre el Sevilla y el Manchester United. Difícil escribir palabras negativas sobre un club al cual sigo desde que tengo consciencia y que soy socio desde septiembre de 2001. Yo he tenido la suerte de vivir todo el crecimiento del SevillaFC y de estar presente en sus logros durante los últimos diez años. Que recuerdos cuando nuestro club vivía con emoción la clasificación para la UEFA, y que hoy en día lo vemos como algo normal, obligado diría yo.  Qué bonito poder contarlo.
Pero el motivo de escribir aquí hoy unas líneas, no son precisamente para hablar de algo “bonito”, sino todo lo contrario, algo más bien desagradable por lo que tuve que pasar y que ante la pasividad del club y las respuestas muy poco convincentes y poco autocriticas que me han transmitido desde las oficinas del club, me veo en la obligación de transmitir a los demás socios el funcionamiento interno del SevillaFC.
Todo lo que voy a contar transcurre el miércoles 21 de febrero:
Al llegar al estadio del SevillaFC, unos 20 minutos antes del inicio como hago en todos los partidos, al pasar por el torno me sale la luz roja y bajo mi asombro, lo vuelvo a intentar y me sale otra vez roja, a lo que la chica de la entrada me dice que vaya a la puerta 28 a presentar el problema en atención al cliente, que al final resulto ser en las mismas taquillas. Al llegar allí, como era de imaginar, había una cola, la cual tuve que esperar unos 15 minutos hasta que me atendió la chica. Le expuse mi caso y me dijo que tenía que contactar con el jefe de taquilla para ver qué problema había, como no le cogía me tuve que apartar y esperar a que lo llamara. Mientras esto ocurría, uno de mis hermanos (socio como yo desde 2001) me llama y me dice que una señora está sentada en mi asiento con una entrada oficial, y que tiene los mismos datos que mi abono, mi abono es total con lo que yo he pagado por ver todos los partidos, y no salgo de mi asombro al escuchar esto y se lo traslado a la de la taquilla, lo cual me dice, que es imposible que pase eso y que se habrá equivocado de asiento la señora.
Después de más de 10 minutos esperando, por fin, un señor de nombre Javi, da la orden por móvil de que desbloqueen mi carnet y pueda acceder al estadio, corría el minuto 10 de la primera parte. Una vez que entro dentro, subo a mi asiento y me encuentro que efectivamente una señora, de procedencia rusa, me enseña una entrada por el valor de 110€ y con los mismos datos de mi abono, y que no se movía de allí ya que había pagado por esa entrada. Yo intento hacerle entrar en razón, pero no hay manera. Para no seguir molestando más a los demás socios que estaban disfrutando del partido, bajo y hablo con un chico de seguridad para expresarle lo ocurrido, con la sorpresa de que otro socio como yo le estaba pasando lo mismo…indignante. Este señor de seguridad nos dice tanto a mi como al otro socio, que no podemos estar en los pasillos que dividen una grada de la otra y que debemos abandonarlo, yo hasta que no llegue nadie del club no me muevo. A los minutos, corría ya el minuto 20 del partido, llega el jefe de seguridad de la empresa externa contratada por el SevillaFC y no más llegar me dice que puede llamar a la policía nacional y me pueden multar hasta con 3.000€ por estar ahí. le explico lo sucedido y me invita a que ocupe otro asiento, ya que al llegar antes la señora tiene derecho a quedarse ahí, no salgo de mi asombro que nadie del club se presente y de explicaciones ante tal atropello a un socio. Después de tratar con esta persona y comentarle la situación accede a subir a mi asiento y a pedirle amablemente a la señora que abandone el asiento, la cual ante la autoridad accede y se marcha, muy enfadada, como es natural. Cuando me senté era el minuto 30 de la primera parte, habiéndome perdido la previa, el himno, y los primeros 30 minutos.
Al día siguiente voy a las oficinas del Sevilla a pedir explicaciones por lo ocurrido y me pasan con la oficina de las taquillas, donde una Señorita me atiende y me dice que según la web del SevillaFC yo he cedido mi abono por la plataforma online para que saliera a la venta al público y se ha vendido mi entrada, no salgo de mi asombro, ¿se imagina cediendo mi entrada el partido más importante de la temporada del SevillaFC hasta el momento? Pues la señorita me dice que tengo 44€ en mi cuenta para el abono del año que viene…Después de insistirle que eso no era posible, mirando de nuevo el monitor se da cuenta que el código que hay que dar para permitir que salga la entrada a la venta al público está mal puesta y me emplaza hablar con el jefe informático el domingo 25 de febrero y que hablase con él ya que algo no estaba bien.  Me presento allí el domingo junto con un amigo para que fuese testigo de todo lo que ocurriese. Este señor me dice en todo momento que la culpa es mía y que el club no tiene nada que ver en lo que ha ocurrido, no tuvo ni siquiera una sola palabra de autocrítica o decir que algo habría podido fallar internamente, nada, la culpa siempre mía.
El SevillaFC, un equipo que aspira a lo máximo, debería serlo no solo sobre el terreno de juego sino en todas sus áreas e intentar tratar mejor aquellas personas que hacen posible que el SevillaFC este donde este, y es a sus seguidores, a sus socios. Debería el SevillaFC “cuidar”, “mimar” a las personas que están apoyando partido tras partido a su equipo, debería tratar de ser más autocritico y ver donde falla. Escribo estas palabras para que aquellas personas a las que les llegue sepan que hoy me ha ocurrido a mí, pero el próximo puede ser cualquiera.
Esta última frase, la cual me ha inculcado mi padre, quiero dejarla por si algún directivo/a o consejero/a viese este post y que hace que día a día sea mejor en lo que hago.
“El que llega por la mañana a su empresa y se siente satisfecho de lo que ha hecho el día anterior acaba hundiendo a la empresa” Robert Waterman
Muchas gracias
Ignacio Rodriguez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario